Texto 1
En una tarde muy tormentosa de otoño, regresando de la universidad, me encontré con una
larga cola de esperanzados jugadores que, soportando una lluvia torrencial salpicada de rayos
y truenos, aguardaban en la calle su turno para comprar un billete de lotería. Por curiosidad,
me acerqué a una pareja que esperaba al final de la cola, divertidos y empapados bajo
un diminuto paraguas, y les pregunté amablemente si sabían que la probabilidad estadística
de que les tocara el Gordo era menor que la de que les cayera un rayo. Un tanto sorprendidos
por mi pregunta, los dos me respondieron sonrientes que “en teoría, sí”, pero no les
preocupaba porque se sentían mucho más cerca del golpe de la buena suerte que de la chispa
eléctrica.
adaptado de Luis Rojas Marcos, La fuerza del optimismo
Texto 2
Entrevistadora: Estudiar y trabajar a la vez es un sacrificio. Díganos, doctor, ¿cómo sobrevivir
en esta rutina devastadora?
Doctor:
Evidentemente, compaginar el trabajo y los estudios genera estrés. Durante
varios años de mi trabajo didáctico en la universidad he observado que este
estrés crece y tarde o temprano se transforma en depresión. Por eso, muchos
especialistas sostienen que un horario flexible, o sea, un horario que deje
espacio para el ocio, ayuda a superar el estrés.
Entrevistadora: ¿Y cómo construir un horario ideal?
Doctor:
Hace falta decidir qué cosas podemos dejar de hacer y a qué cosas
no podemos renunciar para poder disfrutar del tiempo libre y aprovechar
al máximo el tiempo dedicado a los estudios y al trabajo. Además, yo me fijaría
aún en otro factor: en la perspectiva de futuro, porque, a mi parecer,
la perspectiva de futuro contribuye a mantener la motivación.
adaptado de www.biut.cl
Texto 3
Numerosos especialistas cotidianamente andan de programa en programa aconsejándonos
sobre nutrición y cómo llevar una vida sana. Que si la leche hay que tomarla con o sin lactosa,
que si dormir menos o correr más, que si tomar hectolitros de agua diarios o no tomar agua
en las comidas, que si comer chocolate o berenjenas... ¿Por qué tengo que aguantar a estos
locos obsesionados y permitir que me impongan su estilo de vida? Mi estilo de vida es mío,
nadie me lo ha impuesto, lo he elegido yo y me gusta, por muy peligroso que les parezca.
Es una pena que no se limiten a aconsejarse entre ellos, sería más divertido y todos
saldríamos ganando.
adaptado de adrianavieira-lara.blogspot.com